Manuel Blanco Romasanta, conocido como el "hombre lobo" gallego, es una figura infame en la historia de España. Nacido en 1809, es considerado el primer asesino en serie de España y el único caso de licantropía clínica registrado en el país.
Romasanta fue condenado a la pena capital por 17 asesinatos en los bosques de Galicia, de los cuales sólo reconoció nueve. Sin embargo, numerosos expertos siguen mostrando sus dudas acerca de su culpabilidad.
Una leyenda que recorrió Europa a mediados del siglo XIX contaba que en Galicia había un "lobishome", un "hombre lobo" que mediante engaños mataba a niños y a mujeres y les extraía el "sebo" o el "unto", y que lo vendía en Portugal.
Romasanta nació aparentemente como un niño rubio al que llamarían Manuel, a pesar de que en su partida de nacimiento figurase el nombre de Manuela. Sus padres creyeron que era una niña hasta que cumplió los ocho años. Recientes estudios indican que en realidad nos encontramos ante un caso claro de hermafroditismo.
Después de la muerte de su esposa, cambió su oficio de sastre por el de "buhonero", lo que le permitió recorrer el noroeste de la península ibérica. Su primer encontronazo con la ley llegaría en 1844, cuando fue acusado de asesinar a Vicente Fernández, un alguacil de León que lo iba a embargar por una deuda de 600 reales.
A pesar de su condena a diez años de prisión, Romasanta se dio a la fuga y fue declarado en rebeldía. Logró esconderse y vivir durante meses criando ganado cerca de la frontera con Portugal.
La historia de Romasanta es fascinante y aterradora, y ha inspirado numerosos libros y películas.